La gente que no quería a sus pies

Este verano he estado de vacaciones en Tenerife y la Palma. Y vacaciones no siempre significa descanso, así que no hemos parado de andar y andar y andar... y una de las cosas que hemos hecho ha sido, como no, subir al Teide... Nosotras ibamos super bien preaparadas de montañeras autenticas, como siempre, vamos. Y cuando fue nuestra sorpresa cuando llegamos arriba, tan solo a unos metros del cráter, a 3500 metros de altura y 7ºC y nos encontramos gente así:

Obviamente, la ropa acompañaba: tirantes, pantalón corto, sin chaqueta, ni gorra, ni protector solar... la gente sube al teide como quien va a la playa, es el efecto teleférico... Por suerte si que había más gente de montañera como nosotras, esos fuimos los únicos que subimos hasta el cráter.
De regalo, unas fotos allí arriba.

 El azufre del cráter.

La vista de la Isla desde 3718 metros de altura.